Ni la constancia sonora del silencio que hay dentro
Y los gritos que se escuchan en mis pensamientos
Repiten palabras de amor sin alimento
Corrí y olvidé cerrar la puerta
Dejé mil llaves y todas de madera
Pareciera que no me conocieras,
Pareciera que muchas veces no existiera
Mi vacío es predecible
Y la inconstancia de mis emociones silentes
Sujetadas al olvido del presente
Destinadas al recuerdo de un pasado ausente
Me marché y olvidé cerrar la puerta
Dejé mil llaves y todas de madera
Me marché adonde no me conocieran,
Pareciera que muchas veces no existiera
Me marché y olvidé mi corazón
Que no ha dejado de latir
18 de julio del 2008
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